Ella me mantiene vivo, mi pensamiento se va a su casita para verla siempre.
Mi nombres es Alberto Pachas León, soy de la Ciudad de Lima Perú.
He ido a México 3 veces sólo a ver a la Virgen de Guadalupe y Ella me ha acompañado en todos los viajes, he ido en 1994, 2004 y 2015. Ojalá pueda volver nuevamente a verla.
Soy devoto de la Virgen pues, antes de nacer, mi mamá cuando estaba embarazada de mí me llevaba al mercado de Guadalupe, muy cerca a mi casa y después que nací fue costumbre visitar a la Virgen; mi abuela vivió muchos años en México y trajo bellas estampas de la virgencita.
Aquí en Lima, había pocas estampas de la Virgen y no se encontraban libros del milagro de las apariciones, como a mis 18 años buscando libros encontré uno, pero muy poca historia. Luego ya estando en la Universidad, vendían de casualidad libros y encontré un libro delgado de la traducción del Nican Mopohua al castellano, lo leí todo, y con los años encontré más, hasta que vino la Internet y supe mucho de la Virgen.
En 1994, cuando visité la Basílica de Guadalupe, mi alma estaba vacía, ese viaje fue un regalo de la Virgen, fui con mi mamá; ahí conocimos a una Doctora y le pregunté si eran ciertas las apariciones de la Virgen, y me dijo que sí, que Santa María de Guadalupe se encontraba en la Basílica derramando bendiciones.
Ese mismo día fui por la tarde, y compré varios rosarios que quería que me bendijeran, pero había mucha gente, y vi en el confesionario que había pocas personas así que me confesé y le dije al padre que me bendijera los rosarios, y él me dijo que rezara un rosario a los pies de la Virgen.
Fui a rezar y ya estaba oscureciendo; además, prácticamente estaba solo con la Virgen y caminaba de un lado a otro a los pies de la Virgen y sentía algo muy bonito, mi corazón, sentía mucha alegría y una paz que nunca había sentido, de ahí comencé a vivir.
Cuando volví a México en el 2004, fue una odisea pues viajé un poco mal de salud, pero gracias a Dios fui medicado y cuando pisé México un amigo y su familia fueron por mí al aeropuerto y fuimos a ver a la Virgen y poco a poco, se me fue yendo el malestar.
Todos los días que estuve iba a ver a la virgen y tome muchas fotos, porque yo presentía buscar algo y sentir ese bienestar que sentí la primera vez; fui a ver a la Virgen y le pedí por toda mi familia , amigos y todos, y por mis ojos ya que tenía Glaucoma en el ojo derecho, me acuerdo que le dije, Virgencita, he venido a verte con mis dos ojos, si pasa algo ayúdame.
Volví a Lima muy restablecido a finales de Octubre y para fines de Diciembre comenzó a subir la presión del ojo, ya en Octubre del siguiente año había perdido un 80 % de la visión del ojo derecho. Me operaron, y la Virgen cumplió, me ayudaron muchas personas que ni pensaba.
También en mi regreso a Lima hice revelar los rollos de fotos y entre tantas fotos de la Virgen sólo encontré una con los rayos de la Virgen desde la cúpula, vi la foto, y vi que los rayos son del color de la ropa de la Virgen lo cual fue muy significativo para mí.
Hace tiempo, estoy pensando cómo ayudar en algo, para que muchas personas miren a la Virgen y sepan que Ella está presente ahí, derramando sus bendiciones.
Algún día me gustaría volver a ver a la Virgen, ahora ya tengo 63 años y Ella me mantiene vivo, mi pensamiento se va a su casita para verla siempre.
Cortesía: Alberto Pachas León, Lima Perú | 2022